EUROPA
PRESS
19 septiembre
2021
Alopecia,
calvicie y final del verano: ¿por qué se nos cae el pelo más en estas fechas?
Llega el final del verano y pensamos
que, quizás por los excesos del Sol, por el desajuste que hemos llevado de
horarios y de comidas, se nos cae más el pelo que en otras épocas del año. ¿Es
normal que se nos caiga el pelo ahora o esto es independiente de la estación?
Para poder conocer las causas preguntamos a la doctora Alba
Gómez, dermatóloga especialista de la Unidad de Regeneración Capilar de Ruber
Internacional Centro Médico Habana (Madrid), quien parte de la idea de que el
ciclo folicular de cada uno de los cabellos tiene una serie de etapas: una fase
de crecimiento, una de transición y una última fase de caída.
"Todos nuestros tallos pilosos pasan a lo largo de
nuestra vida muchas veces por estas fases del ciclo y por lo tanto siempre hay
un porcentaje de ellos que se encuentran a la vez en la fase de caída, llamada
'telogen'. Esta es la caída que percibimos como
rutinaria, y suele corresponder a un porcentaje inferior al 15% del total de
nuestros pelos", detalla.
Por lo tanto, dice que es normal que exista una caída de
cabello mantenida a lo largo del año, siempre por debajo de este porcentaje,
que no suele corresponder a más de 100 cabellos al día, y que es necesaria y
forma parte del ciclo normal del pelo, para que pueda renovarse y comenzar un
nuevo ciclo.
La especialista de Quirónsalud
mantiene que, habitualmente, la mayor parte de los cabellos que acaban un ciclo
vital se desprenden con una pequeña tracción que se ejerce con el lavado o el
peinado, por lo que son los dos momentos en los que veremos la caída capilar
agrupada.
"Esto implica que, si lavamos el pelo a diario,
repartiremos esta caída en varios momentos, mientras que si lo lavamos cada 2 o
3 días, veremos un mayor número de pelos simultáneos durante este lavado. Esto
no debe ser positivo ni negativo, simplemente son los cabellos a los que les
toca reiniciar un nuevo ciclo vital y deben desprenderse, lo pueden hacer en
pequeñas cantidades con el lavado diario o en un mayor número si los agrupamos
en lavados cada 2-3 días, pero la cantidad total no va a variar ni el lavado o
el peinado influirán en que sean un mayor o menor número los pelos renovados",
aclara la dermatóloga.
En este sentido precisa que la maquinaria del ciclo capilar
se maneja desde capas más internas del cuero cabelludo y los cabellos que caen
ya estaban programados para ello, con el lavado o cepillado solo se aporta la
mínima tracción necesaria para ayudar a que se desprendan.
Entonces, ¿por qué se nos suele caer más el pelo en la época
estival o justo después de las vacaciones, en torno a septiembre? ¿Tiene algo
que ver el efecto del sol? La doctora Gómez aclara en este sentido que este
ciclo vital capilar es muy sensible a un gran número de estímulos externos,
incluido a los cambios de estación a lo largo del año.
"Cada persona sabe cuáles son los meses en los que su
caída capilar es mayor y no es raro que el patrón se repita de forma cíclica
año tras año. Los periodos de caída más comunes son la primavera y el otoño,
pero no todas las personas somos iguales, y en temas capilares no iba a ser
distinto. Por lo que hay personas que tienen sus fases de mayor caída capilar
en verano, sin que se trate de nada patológico o negativo", agrega.
Es más, precisa que en estos periodos de mayor caída existe
un pequeño desajuste del ciclo folicular y algunos de los cabellos que se
encontraban en fase de crecimiento, llamada 'anagen',
pasan sin que les corresponda, de forma prematura y antes de tiempo a fase de
caída.
"Por ello, el porcentaje de renovación sube un poco del
15% y de los 100 cabellos diarios durante unos meses, que no suelen ser más de
3 o 4. A este fenómeno, de renovación capilar aumentada le llamamos 'efluvio
telógeno', y cuando se relaciona con cambios estacionales no suele revestir
gravedad, ni tiene repercusión sobre la densidad capilar final, ya que existirá
una recuperación completa tras el reajuste del ciclo", asegura la especialista.
En las personas en las que esta mayor caída o modificación
del ciclo capilar se produce en verano sí advierte de que puede relacionarse
con el cambio en estilo de vida que implican las vacaciones y la salida de la
rutina laboral, más que a la exposición solar o los múltiples baños en playas y
piscinas; ya que estos factores influyen más en el tallo externo del pelo, la
parte que podemos ver, y crece hacia el exterior que en el ciclo capilar, que
se trata de algo más interno y regulado por factores diferentes, entre los que
sí se pueden encontrar los cambios de horarios, de rutina diaria, el estrés o
la mayor relajación asociada a los periodos vacacionales como el verano.
¿Podemos prevenirlo de alguna manera?
En esta línea, la dermatóloga especialista de la Unidad de
Regeneración Capilar de Ruber Internacional Centro Médico Habana recuerda que
estas fases de mayor caída son temporales, y habitualmente tienden a resolverse
espontáneamente.
"La caída persiste 3 o 4 meses y luego cede y se
recuperará la densidad capilar de forma íntegra. Habitualmente, cuando estos
periodos de caída estacionales ocurren, las personas son capaces de
identificarlos y evaluar su severidad, ya que suelen darse de forma similar
cada año en esas fechas", agrega.
A su juicio, será necesario consultar a un especialista si
el periodo de caída se alarga más de lo habitual o la intensidad del mismo es
superior. "Si se trata de una caída rutinaria, en fechas previas, un poco
superior a la normal no sería necesario tomar ninguna medida adicional aunque
siempre se pueden recomendar complejos vitamínicos que incorporen los
principales nutrientes y vitaminas que precisa el cabello para su formación en
las nuevas fases de anagen del ciclo capilar que
reiniciarán", añade.
Si la situación excediera 'lo rutinario' la experta de Quirónsalud cree que sería necesario ponerse en manos de un
especialista en Dermatología para que indicara los siguientes pasos a seguir,
ya que entonces sí que habría diversas opciones de tratamiento para frenar la
caída y recuperar la densidad perdida, como el plasma rico en plaquetas, o el
fármaco minoxidil.
Es más, la doctora Gómez subraya que "lo habitual"
es que la persona sea capaz de detectar estos índices de caída, bien porque
sean superiores en número de cabellos desprendidos a lo ocurrido otros años, o
bien porque persista en el tiempo más de lo que estamos acostumbrados por
episodios anteriores.
"Por lo tanto, seremos capaces de identificar la
situación de riesgo y una mayor caída capilar y consultar al dermatólogo especialista
en tricología. Si nuestra caída se mantiene estable a lo largo del año, en las
cifras que se han mencionado previamente y por primera vez hay un episodio de
más caída, será mejor consultar al especialista para orientar el cuadro y poder
magnificar su severidad", sostiene.